14. El chocolate del este.

Incluso cuando piensas que lo tienes todo, que por fin lo has conseguido, que ahí está, todo lo que has buscado, todo lo que querías, ahí lo tienes, delante de tus ojos, por fin, menos mal, existe, y ahí está, sólo para ti. Incluso cuando lo piensas, incluso cuando todo parece ir bien, parece que sí, que ya está... incluso en ese momento es pura ilusión. Lo cierto es que has dejado de creer en él, el amor es totalmente pasajero. Dura tanto como te lo propongas. Si es cierto que nada es para siempre, mucho menos el amor. Pura invención. Pura patraña. Nunca vas a estar en el mismo momento vital que la otra persona. Incluso cuando piensas que lo tienes todo, que por fin la has conseguido, que ahí está, todo lo que habías buscado, todo lo que querías, ahí la tienes, delante de tus ojos, por fin, menos mal, existe y ahí está pero no es para ti. No ahora. No en este momento. En otro, quizás. Pero no ahora. Y lo dejas pasar. Porque sí. Porque, de repente, una mala palabra, un mal gesto. Y ya no sientes nada. Y se acaba todo. Porque el amor es pura ilusión.

El chico berlinés te pregunta sobre si alguna vez te has enamorado a primera vista. Tú ríes a carcajadas y respondes que siempre. Aunque le dices que hubo una vez en la que te enamoraste de una mente. Pero que también acabó. Y que ya no crees en nada. El chico berlinés viste una camisa blanca de flores verdes extrañas, el estampado es muy parecido al de una vieja sábana. Lleva unos jeans negros. Unas deportivas totalmente rotas que dejan entrever sus pies. El chico berlinés lleva un sombrerito verde militar a juego con su chaqueta. En el sombrerito lleva colocada una florecita amarilla seca. Cuando le preguntas por qué, él te responde que esa flor es la que primero florece en primavera. Y que para él significa que el sol ya ha llegado. Y con él, las ganas de vivir. 

Desde la ventana de la escuela de Arte del barrio de Prenzlauer se ve la torre de Alexanderplatz. Es de noche. Está iluminada por luces azules y rojas. Como siempre, es lo único que te hace ser plenamente consciente del sitio en el que te encuentras. Es el punto de orientación, en todos los sentidos. Asomados a la ventana de la tercera planta, el se lía un cigarrillo. Tú miras el cielo estrellado. Es la primera vez que ves estrellas en el cielo sobre Berlín. Le preguntas cómo fue vivir la caída del muro. Que en qué bando nació. Te dice que

[...] Si quieres seguir leyendo, puedes conseguir el libro en www.madeinbarna.com ¡¡RESOLUCIÓN DE LA HISTORIA Y CAPÍTULOS INÉDITOS!!